¿Qué se necesita para ser un redactor de contenidos Freelance?

Si tienes habilidad para la redacción te puedes convertir en un redactor de contenidos Freelance (es decir, por tu cuenta) y poder ir haciéndote un hueco en este mercado que ahora mismo tiene unas oportunidades muy buenas. Ahora bien, lo primero que debes de saber es que no todo el mundo sirve para redactar: muchos querrán intentarlo, pero muy pocos lo conseguirán.

En este artículo te vamos a ofrecer un extenso textos con algunas de las consideraciones que el posible futuro redactor debería de considerar:

Primeros obstáculos que debe de vencer el redactor de contenidos

Bloqueos

Uno de los principales problemas de un redactor de artículos es que se va a tener que extender hasta lo indescriptible. Por mucho que hayas escrito sobre algún tema y lo domines, vas a encontrar dificultad cuando un cliente  te pida, por ejemplo, 10 artículos de 2000 palabras sobre lo mismo (si, suele pasar).

Será entonces cuando nos encontremos sobre la mesa muy poca información y tendremos que distribuirla en 10 textos muy extensos… ¿Qué es lo que hacemos entonces? Pues no queda otra que contar lo mismo pero de diferentes maneras; la prima máxima es jamás generar contenido duplicado.

Se imaginativo, utiliza diferentes palabras y te darás cuenta de cómo poco a poco te puedes extender a textos más largos.

El error de redactar: Muchas personas piensan que si te cansas de un artículo, lo mejor es dejarlo para luego… pero no. Intenta acabarlo (a no ser que literalmente te estés muriendo). Ya te decimos que dejarlo para luego lo único que hará es que después te vuelvas a encontrar el mismo artículo y parezca que es infinito.

 

Conocimientos

Otro de los detalles que el “redactor de contenidos” debe de considerar es que no solo se trata de redactar, si no que es importante darle la forma al texto de la manera adecuada. En un primer momento necesitaremos que el texto sea ameno para que el cliente lo pueda llegar a ver como interesante; de lo contrario, no tardará en irse a la competencia.

Además, este redactor tendrá que saber cómo integrar las palabras clave: La idea es que el buscador de Google las pueda localizar y ofrecernos siempre las mejores posiciones…. pero eso si, sin colocarlas en cualquier parte porque el texto tiene que cobrar sentido de cara al usuario.

 

Búsqueda de clientes

Es verdad que es un punto de oportunidades y que el trabajo de redactor está muy solicitado… pero, por lo menos en un principio, no te va a llegar el trabajo por si solo. Tendremos que buscar fórmulas para hacer que llegue a nosotros.

Por ejemplo, podemos anunciarnos en foros, en páginas de anuncios o en tu propio blog en el caso de que dispongas uno.  Por supuesto, el redactor de contenidos, a la hora de redactar su anuncio, jamás debe de cometer ninguna falta ortográfica.

También es de vital importancia trabajar con los precios correctos, ofrecer textos optimizados para SEO, y cualquier otra cosa que pueda ser interesante de cara al cliente.

 

Un error de principiante: No intentes cobrar los textos demasiado altos en un principio; espérate a a que te conozcan y poco a poco, podrás hacer pequeños incrementos graduales.

Controla la presión

En el momento en el que se trabaja desde casa se tienen unas facilidades que no tienen otros trabajos…pero ni de lejos es fácil ni ameno. Probablemente te vayas a encontrar a personas que piensan que tienes el trabajo más sencillo del mundo; o puede que sea uno de los más complicados.

No te vamos a engañar: para que puedas vivir de redactor tendrás que escribir una alta cantidad de artículos al mes. Aunque esto dependerá de lo que cobres por palabra, con unas 6000 palabras al día ya podrías tener un sueldo más o menos interesante.

El principal problema que tendrá el redactor de contenidos es que va a tener diferentes clientes haciendo pedidos al mismo tiempo. Si por ejemplo, tenemos a un cliente haciendo un pedido de 2.000 palabras, uno de 8.000 y uno de 20.000, iremos notando como aumenta la presión.

¿Cómo podemos manejar esto? Pues poco a poco y, sobre todo, con mucha rapidez. Si tan solo eres capaz de hacer 1.000-2.000 palabras al día, desgraciadamente la figura del redactor de artículos solo te reportará algunos ingresos extra, pero nunca principales.

 

Compromiso

A lo largo de nuestra larga experiencia en el mundo de la redacción, nos hemos dado cuenta de que uno de los criterios que hacen fracasar a cualquier redactor de artículos es precisamente la falta de compromiso. Un redactor, en cuanto acepta un pedido, debe de ser capaz de saber en cuanto tiempo lo va a hacer y establecer un plazo fijo de entrega; podemos fallar una vez, pero a la siguiente el cliente no te lo va a perdonar.

No establezcas periodos de entrega muy justos: a veces conviene ampliarlo un par de días para no “pillarnos los dedos”

¿Vale la pena asociarte con otros redactores?

En lo primero que debe de pensar un empresario, sea un redactor de contenidos, o bien se dedique a otra cosa, es en que si tiene tanto trabajo que no lo puede sacar por si mismo, lo que debería de hacer es reunir un completo equipo de redactores. ¿El problema de esto? La falta de compromiso.

Encontrar a un “redactor de artículos” que sea rápido, que cumpla, que escriba bien y que optimice para SEO es tremendamente complicado; los pocos que hay ya están cogidos.

Podemos ir probando redactores hasta encontrar alguno adecuado, pero esto también tiene un problema: perderemos mucho tiempo explicándole las condiciones que va a cumplir el texto, analizando si es de calidad o no, comprobando si es duplicado…

La idea final debe de ser asociarse… pero en la práctica dista mucho de poder conseguirse.

¿Cómo convertirte en un redactor de contenidos a nivel profesional?

Si has conseguido vencer todos los obstáculos anteriores; es decir que, a nivel mental, ya estás preparado para todo lo que te vas a encontrar, ahora tenemos que enfrentarnos a los obstáculos reales que tenemos en nuestro camino.

 

¿Quieres ser redactor de contenidos profesionalmente? Sigue leyendo para descubrir cómo puedes hacerlo:

 

Redactor “legal”:  Una de las ventajas de ser redactor es que no tendremos que estar invirtiendo en demasiadas cosas para lanzar nuestro negocio. Ni necesitaremos un establecimiento físico, ni un equipo excesivamente potente, ni historias relacionadas. Eso si, tendremos que darnos de alta como profesionales, asumir el pago de impuestos, así como enfrentarnos a la cuota de la seguridad social.

Aparte de que hay que hacer esto porque, de lo contrario, estaríamos incurriendo en sanciones administrativas, a las empresas les viene bien que estés dado de alta porque luego se pueden desgravar tus facturas (es otro punto a favor para que te escojan por no muchos redactores están dados de alta).

Ahora bien, si solo te haces unas 2000 palabras al día y te sacas como 300€ al mes, si te metes en todos estos follones pagarás más de lo que cobras… en este caso deberías de acudir a una asesoría para determinar lo que deberías hacer.

 

Métodos de promoción: La verdad es que las fórmulas que mejor funcionan para ser redactor de contenidos es promocionarte a través de foros… o ni eso ya que ya existen muchas personas que están buscando a un redactor.

En cualquier caso, para poder dar una buena presencia al cliente no estaría de más poder crear una página web e ir “alimentándola” poco a poco con contenido de la más alta calidad posible (al fin y al cabo eres redactor de artículos ¿no?).

No te olvides de promocionar todas estas publicaciones en Facebook porque nunca se sabe.

 

La inestabilidad del mundo de Internet: Aunque con la redacción de contenidos se puede llegar a ganar mucho dinero, te recomendamos “no meter todos los huevos en la misma cesta”. Es decir, puedes dedicarte a hacer más cosas a la vez (¿quizá ofrecer servicios de hosting?).

Si en un momento dado no tienes textos para redactar, te podrás dedicar a otra cosa para seguir ganando dinero.

Estadísticamente, cuantas más cosas hagas, más probabilidad habrá de que tengas éxito con alguna de ellas. Si sigues siempre en lo mismo puedes triunfar o no… pero si te acabas cayendo, no tendrás ese “plan B” para poder seguir adelante.

 

Sacrifica tu tiempo: No te queremos engañar, el trabajo del redactor de contenidos es arduo y se necesita echar muchas horas para conseguir ganancias de verdad (a veces más de las que tiene el día). Conviene ser ágil para poder dar un buen servicio a tus cliente: intenta solo abarcar a los que puedas atender.

Si el cliente te dice que puede esperar, puede ser cierto pero a nadie le gusta hacerlo. Si tardamos excesivamente entregando los textos, puede llegar el momento en el que aparezca un nuevo redactor de artículos mejor que tu. Gestiona bien los tiempos y escribe sin parar; poco a poco serás más rápido y darás un buen servicio.

 

Aunque estas claves te van a venir muy bien en tu proyecto… no es ni la punta del iceberg de todo lo que el “redactor de contenidos” debería de considerar. Sin embargo, teniendo estas bases estás preparado para poder enfrentarte tú a lo que está por venir.

Te interesa leer sobre:

Redactor generalista o especializado

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *